lista para ser follada duro en la lavanderia

Desde que lo vio entrar por la puerta de su despacho por primera vez, supo que se lo tiraría si nadie lo evitaba y por supuesto su marido no iba a ser quien lo hiciera. Lo primero que le hizo su amante fue comer su precioso culo y con esa técnica era muy difícil que se le resistiera a follar con él.