Sirvienta pillada limpiando la casa desnuda

Siempre hay una primera vez en la vida para todo y más cuando empiezas un nuevo negocio o buscas alternativas para ganar más dinero. Esta jovencita se ha decidido por dedicarse a la prostitución para aumentar sus ingresos y hoy está ante su gran prueba fe fuego, su primer cliente. Para que le resulte más cómodo, ha pedido al chico que venga a su casa y así encontrarse en un ambiente familiar. A juzgar por la experiencia, no le ha ido nada mal esta primera vez.